Comunicación vs intención del mensaje y la Vocinglería de Susana Gotreaux
Por Hilario Ramirez
Según McLuhan, la trascendencia de la comunicación y la intención del mensaje residen en el medio mismo, no en el contenido.
Su famosa frase «El medio es el mensaje» destaca que los medios de comunicación no solo transmiten información, sino que también moldean nuestra forma de percibir y procesar el mundo.
La intención del mensaje, en este contexto, no se limita a la información que se transmite, sino a la transformación que el medio provoca en nuestra conciencia.
Barrick Gold y Medioambiente: a quién de esas instituciones le confiere mayor potestad en decidir el destino de RD y el mote «patriotas» ?
El caso a ejemplificar con la emisora Z101-FM
Enamorarse del comportamiento humano y su lenguaje dual
Seamos observadores en el símil analógico en la ley causa y efectos, al momento de la búsqueda por nuestra calidad de vida y enfrentada por la malicia interesada en quienes nos rodean.
La verdad de un discurso, dependerá del cuidado que tengas al emplear tu discurso alrededor de un prójimo manipulador y amoroso al dinero que le mueva a distorsionar la realidad del acontecer cotidiano.
Como dijo el preocupado padre por la salud de una hija, a Dios hijo: Jesuscristo «tan solo una palabra tuya bastará para sanarla».
Así también una sola palabra bastará para destruir la vida consagrada, si es pronunciada bajo manipulación de alguien a quien más le importa el dinero que la salud medioambiental y la biodiversidad dentro de ella.
Hasta dónde llegará la vocinglería en los medios y comunicadores de prostituido cerebro !
Susana Gotreaux incita a los cuerpos castrenses sean represivos ir en tarea inquisidora contra el sacerdote Jhony Durán, acusándolo de mentiroso e inventor de historias falsas tras denunciar la muerte de un ambientalista causada por gases lacrimógeno más una ancianita hospitalizada.
Rememoró Susana, sobre las también denunciadas heridas que dijo el cura les propinó agentes de la policía. Señaló que fueron mentiras también.
La distancia entre dos puntos donde habitan Dios en un extremo y el diablo en el otro: lo separa el dinero para determinar la conquistada voluntad humana.
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