Para elevar hasta la cúspides el orgullo de ser Uasdianos

La denuncia que hiciera el Equipo dél Director General del Recinto UASD Santiago en el día de ayer, merece un análisis profundo y preocupante sobre el Camino que ha iniciado la Universidad Autónoma de Santo Domingo UASD, con la visión de retroceso que vislumbra la nueva gestión, ésto no tiene precedentes en la historia de la UASD, o no encontramos una actitud desenfocada en ése despropósito.

 

La autonomía universitaria no es una “ocurrencia” o un simple deseo de hacer lo que se venga en gana. Todo lo contrario, es un proceso que ha costado grandes luchas y vidas, y que no ha sido nada fácil lograr ni mantener, y que ha venido agravando normas y reformas que democrática y patriótica mente debería elevar los principios de los valores enunciados en su Estatuto Orgánico en los Artículos 7, 8, 9, dónde se enuncia la Misión, Visión,  Principios y valores éticos morales, con los que debe comprometerse las autoridades de la UASD en sentido general.

 

Hay personas que se dicen Ser “demócratas”, pero no toleran la disidencia, la objeción a sus intereses políticos, ni mucho menos la movilización opositora a los mismos. 

 

Para ellas, la autonomía universitaria es una especial amenaza a sus deseos de control político y, particularmente, de desmantelamiento del Estado social de derecho, núcleo de la relativa paz social dentro de la UASD dé hoy.

 

 Los neoconservadores aborrecen abiertamente las tesis pro-Derechos Humanos y el carácter laico de la educación superior, al Gobierno Central le incomoda la oposición a sus proyectos gestada desde las mentes y el trabajo serio en las universidad. 

 

En síntesis, quienes defienden el statu quo saben que si logran lesionar la autonomía universitaria, tendrán la vía despejada para imponer sus agendas.

 

Pero más que la autonomía, hoy sé pone en riesgo la descentralización administrativa de los Recintos Universitario, utilizando el modelo clientelar como una manera de dirigir la institución de educación superior.

 

Sólo basta con observar la exigencia para poder llegar a un acuerdo con la autoridades del Recinto UASD Santiago electas en la misma elecciones que fue electo el Distinguido señor Rector, pero éste sé empecina en desconocer el resultado de la Asamblea dél Recinto UASD Santiago, alegando que el grupo que perdió las elecciones pasadas las cuales el sé empecino por imponer, como acuerdo sectorial y político, matrizado por el favoritismo partidario, sin hacer una expresión académica Real, No acepta que un simple mortal los hayan derrotado.

 

Ese Simple mortal que en apenas 50 Días le ha dado respuesta al abandono y deterioro a que fuera sometido el Recinto UASD Santiago durante la gestión pasada, dejando un triste lastres, que no tiene precedentes en las Direcciones que han evolucionado la historia de éste Recinto y su desarrollo vertiginoso.

 

De está manera Señor magnífico Rector, no se elevará jamás hasta la cúspide el Orgullo de Ser Uasdiano, y en está etapa de Post pandemia el clientelismo universitario debería ser más prudente y menos peseteros, para lograr estabilizar la UASD dél Siglo XXI, enterrada en el Siglo XX.

 

Recuerde Señor Rector Que Ya no todos los caminos conducen a Roma.