El ala izquierda del movimiento político Dominicano juega un papel fundamentalmente coyunturalista, se ha olvidado de la lucha como forma de ascender, previa caracterización de la situación nacional, haciendo agitación y propaganda constantes y acompañando a las masas en sus procesos aportando sus propias propuestas para la movilización.
Lejos de esto los llamados progresistas se montan en las marchas cuando estas afloran, como las realizadas en los casos Barrick Gold y Falcondo Xtrata Nikel, dejando de lado el trabajo cotidiano, pues en el camino de su desarrollo descubrieron que salemas barato enfocarse en la participación que electoral que jugársela en los procesos vivos, donde se corren riesgos incalculables.
Con actitud matan su propia posibilidad del crecimiento , ya que tienden a acumular desgaste y alejan la posibilidad de integrar masivamente a aquellos que con su ímpetu pueden ir mucho mas allá, porque es sobre los hombros de los jóvenes, donde descansa la esperanza de redención de los desposeídos , a través del cambio social.
Si los pseudosocialistas nuestros no se enfocan en la lucha estarán ayudando a malograr el futuro de las próximas generaciones, no solo de dominicanos, sino de los pobres del mundo, con los cuales hay que coordinarse, porque los métodos de explotación se aplican de igual manera en cualquier parte del planeta, hay que dar una respuesta mundial a un problema mundial.
Para esto se necesita una evolución de los supuestos marxistas de nuestro país, una evolución que los lleve a ver la política como un conjunto de acciones cotidianas que pongan en jaque al sistema y que los coloque en una perspectiva, que les permia ver mas allá de los beneficios obtenidos mediante acuerdos llevados a cabo con el ala derecha, PRD y PLD.
