Sobre la Marcha en FRIUSA

«Oponerse a la marcha convocada en Friusa implica desconocer la soberanía dominicana sobre ese territorio. El gobierno debe garantizar la seguridad para que la manifestación se desarrolle sin incidentes, ya que la Constitución protege el derecho a la protesta, sin excepciones geográficas.
El gobierno debió actuar en 2021, cuando el exdirector de Migración declaró que los organismos de seguridad del Estado no podían ingresar a esa zona. Probablemente, esa inacción haya contribuido a la convocatoria de la marcha prevista para el 30 de marzo.
Por otro lado, las precariedades que sufren los residentes de Friusa representan una oportunidad para visibilizar la situación y exigir la provisión de servicios básicos, que, según los reportajes, son inexistentes. Resulta lamentable que, en un área de tanta opulencia por la inversión extranjera, tantas personas vivan en condiciones de pobreza extrema.
En cualquier circunstancia, el derecho a marchar, protestar, asociarse, reunirse, expresarse, opinar e informar debe prevalecer sobre cualquier otro interés.»
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