La verdad como no la expresa Noel de la Rosa, y la mentira como estrategia, psicosocial

Por Henry Polanco

Un gran análisis científico del Maestro Noel de la Rosa, Aunque dice la frase refranero del jolglorio popular que, Para Hablar mentira y comer pescado hay que tener mucho cuidado, Un comentario propio de la lectura de este interesante libro.

La historia de la humanidad la que nos han contado y que hemos aprendido en hogares, escuelas y universidades con gríngolandia de por medio, está llena de falsedades.

Está preñada de mentiras a granel. Farsas e invenciones ajustadas, muchas veces, a los intereses de quienes detentan el poder político-militar, económico-financiero o eclesiástico.

 Sobre todo, de quienes controlan los llamados mass media: medios, mecanismos y formas de divulgar la «verdad». Aún en medio de la «aldea global» de Mc Luhan, del revolucionario internet, de las redes sociales y del inusitado desarrollo de las TIC´s, todos los días, nos encontramos con cientos, miles o millones de bulos y fake news.

No es fácil saber quién dice la verdad verdadera, en estos tiempos de crisis.

Especialmente, porque no tenemos cómo comprobarla. No nos queda otra alternativa que apelar a la lógica racional y a la lógica fluida o, a veces, a nuestro juicio intuitivo o práctico para tratar de desentrañar, a fuerza de múltiples relaciones y comparaciones, dónde puede estar la verdad verdadera y no la que nos quieren hacer creer a través de estos medios y redes de comunicación social e incluso, a través de «radio bemba» y ¿quién sabe? si de otros instrumentos subliminales o psicológicos aún desconocidos, que forma parte de  «La Mentira, Como estrategias Psicosocial» , Del Distinguido Maestro Noe de la Rosa, muy bien analizado.

Hemos aprendido «verdades» pensadas, escritas, publicadas y divulgadas, una y otra vez, por los vencedores. 

Los vencidos, por lo general, son aislados, excluidos y sepultados junto a sus propias verdades. 

Aunque hoy, con el avance de las redes sociales y las TIC´s los vencidos, dominados o explotados, también tienen la posibilidad de contar sus historias. 

Aunque sólo parciamente. No con la misma fuerza que quienes nos dominan. Por eso la verdad que prevalece hoy puede no ser la verdad que domine mañana. 

Es como argumentaba Thomas Kunh, refiriéndose a la Ciencia establecida, se puede producir una «ruptura de paradigmas» que les de paso a nuevas verdades, modelos explicativos distintos y, en oportunidades, algunos incluso contradictorio u opuestos a los existentes. 

No nos deben quedar dudas que quien es dominado, vilipendiado o explotado hoy, puedo ser el dominador, acusador y explotador del porvenir. Por tanto, una verdad aceptada de perogrullo hoy día puede no ser aceptada mañana, 

 y a la visconversa.

 Una mentira expresada hoy puede convertirse en la verdad del futuro. 

Todo depende o dependederá, Sobre todo del poder fáctico que existe detrás de la verdad que se defiende. Cuando la razón y el poder se enfrentan ¿Quién cree que gane? Hay quienes aseguran que es el conocimiento.

Como nos asegura Alvin Toffler en la Tercera Ola. Aunque no siempre es así, por eso nos surgen varias interrogantes desde el principio hasta el fin, Como son:

¿Quién tendrá la razón Rusia o Ucrania? 

¿Existe Dios o lo hemos creado nosotros? 

¿Somos apenas una realidad virtual como insinúa Elon Musk? 

¿La vida es un sueño y seguiremos soñando?

 ¿Hay vida después de esta vida? ¿Vida eterna? 

¿Existen los extraterrestres?

 ¿Están entre nosotros?

 ¿Antiguos astronautas de otros mundos o alienígenas ancestrales poblaron y ayudaron a crear y a formar a los habitantes del planeta?

 ¿El maléfico domina al mundo?

 ¿Se acerca la segunda venida de Jesucristo?

 ¿La Biblia fue tergiversada y modificada intencionalmente?

 ¿El socialismo es mejor que el capitalismo? 

¿Es posible una tercera Vía que podemos llamar Ambientalismo o Proporcionalismo?

 ¿Son mejores las dictaduras que las democracias?

 ¿Resucitaremos o reencarnaremos?

 ¿Quiénes son más corruptos los Moraos, los rojitos los azules los blancos o la derecha o izquierda? 

¿La revolución será irreversible? 

¿La patria ha sido traicionada? 

¿La tercera guerra mundial viene en camino? 

¿Judas verdaderamente traicionó a Jesús o este le dio una orden que aquel cumplió disciplinadamente?

 ¿Dónde y quiénes tienen la verdad en sus manos? 

¿Nos importa saber la verdad? 

¿Es cierto que la verdad nos hace libre y ella es revolucionaría? 

Todas estas interrogantes han creado paradigmas que son contadas e interpretadas, por unos asimilados como verdades y por otros como dudosas.

Los Historiadores, los sociólogos y los investigadores del saber, los Psicólogos, Ahora los Politólogos, entre otros, comprenden que aunque pueden haber verdades absolutas, la mayoría de ellas son relativas o situacionales.

 Depende de nuestro nivel de información y del procesamiento que hagamos de la misma, así de nuestras creencias, valores y principios. 

Del lugar que ocupamos en la situación concreta. y muchas Etcétera mas.

Es por ello que un mismo hecho o acontecimiento histórico puede ser descrito, juzgado o evaluado de muy diversas maneras.

Mientras que al final, quienes dominen y tengan mayor poder y conocimiento impondrán sus verdades. Aunque todas o algunas de ellas sean falsas.

Lo ideal, por supuesto, es que el poder y la razón se encuentren, se armonicen y se complementen, para que cuando leamos y aprendamos de Historia Universal e Historia de nuestro país, incluso de nuestra propia vida familiar logremos saber la verdad y los misterios, las falsedades y los ocultamientos disminuyan, pues siempre habrá manejo Psicosocial de la Mintira basada en estrategias de dominación o control de las masas, 

Así llegamos a la conclusión del poeta Ramón Ortega en:

VERDADES AMARGAS

Yo no quiero mirar lo que he mirado a través del cristal de la experiencia, el mundo es un mercado en que se compra amor, voluntad y conciencia.

Amigos, es mentira, no hay amigos, la verdadera amistad es ilusión, ella cambia, se aleja y desaparece, con los giros que da la situación.

Amigos complacientes sólo tienen los que disfrutan de ventura y calma, pero aquellos que abate el infortunio, sólo llevan tristezas en el alma.

En este laberinto de la vida, donde tanto domina la maldad, todo tiene su precio estipulado, amores, parentesco, y amistad.

El que nada atesora, nada vale, en toda reunión pasa por necio; y por nobles que sus hechos sean, lo que alcanza es la burla y el desprecio.

Lo que brille nomás tiene cabida, aunque brille por oro lo que es cobre, lo que no perdonamos en la vida es el cruel delito de haber nacido pobre.

La estupidez, el vicio y hasta el crimen pueden tener su puesto señalado, las llagas del defecto no se miran si las cubre un diamante bien tallado.

La sociedad que adora su deshonra persigue con saña al criminal, más, si el puñal es de oro, enmudece el juez…y besa el puñal.

Nada hermano es perfecto, nada afable, todo está con lo impuro entremezclado, el mismo corazón con ser tan noble, cuántas veces se encuentra enmascarado.

Que existe la virtud…yo no lo niego, pero siempre en conjunto defectuoso, hay rasgos de virtud en el malvado y hay rasgos de maldad en el virtuoso.

Cuando veo a mi paso tanta infamia y que mancha mi planta tanto lodo, ganas me dan de maldecir la vida, ganas me dan de maldecirlo todo.

Porque ceñido a la verdad estoy, me dieron a libar hiel y veneno, hiel y veneno en recompensa doy.

Y si tengo la palabra tosca, en estas líneas oscuras y sin nombres doblando las rodillas en el polvo, pido perdón a Dios, pero no al hombre.