UN DIA UNIVERSAL DEL TRABAJADOR Y ESTADOS UNIDOS NUEVAMENTE
Por Henry Polanco
El día universal de los trabajadores en medio de la pandemia del Coronavirus, encuentra a millones de personas desempleadas y con ello un panorama de esperanza desesperada , ante la sobrevivencia del sistema político económico social, de explotación del hombre por el hombre.
Han transcurrido 134 años desde la huelga desatada en Estados Unidos, donde miles de obreros salieron a las calles a reclamar sus derechos por una jornada laboral de ocho horas, ya que el obrero debía laborar 12 horas diarias, lo cual no ha sido superado en todas su parte.
Fueron días de intensas protestas que concluyeron con la salvaje represión de la policía de Estados unidos contra los indefensos huelguistas y una masacre en la plaza de Haymarket. Luego de un amañado juicio, varios de ellos fueron encarcelados y cinco condenados a la horca.
Sin embargo, durante más de una centuria en Estados Unidos nunca se ha celebrado el Día Internacional de los Trabajadores, mientras en cientos de ciudades del mundo se recuerda y rinde tributo a los Mártires de Chicago.
El origen de la celebración del Primero de Mayo hay que buscarlo en las demandas obreras que desencadenaron los trágicos sucesos acaecidos en esa ciudad norteamericana, en un 1 de mayo de 1886.
Cuando los norteamericanos salieron a las calles en busca de salir del yugo pesado de un patrón que se enriqueció de manera cruel de la fuerza de trabajo sin aportar nada a cambio, en aquellos tiempos no se hablaba de seguridad social, ni de remuneraciones al trabajador, aunque en esa incertidumbre un alemán apellidos Marx se fundia el cerebro para demostrar como le robaban las fuerzas de trabajo al obrero.
El primero de mayo de 1886, tal como se había acordado en los congresos de la Federación Americana de Trabajadores (FAT), consecuente con lo que veinte años antes había proclamado la Internacional Socialista en su congreso de Ginebra en 1866, comenzaba una huelga de los obreros estadounidenses por reclamos esenciales.
Ese día estalló la huelga en Chicago cuya magnitud no tenía precedentes en el país. Los patronos emplearon rompehuelgas acompañados por la fuerza pública que desató una brutal represión con el saldo de seis huelguistas asesinados y decenas de heridos y detenidos.
Tres días después, como respuesta a esos hechos, los líderes obreros de Chicago convocaron a un mitin en el Haymarket Square. Todo comenzó pacíficamente, pero al final la policía tiroteó a la multitud y una bomba que explotó en esos instantes mató a ocho agentes.
Las fuerzas represivas se emplearon a fondo con una masacre. Arrestaron a ocho dirigentes sindicalistas, algunos de los cuales ni siquiera estaba en el lugar de los hechos. Siete acusados fueron condenados a muerte y uno a 15 años de prisión.
El 11 de noviembre de 1887 fueron ahorcados Albert Parsons, August Spies, George Engel y Adolph Fischer. Louis Lingg murió en la cárcel en misteriosas circunstancias, por un supuesto suicidio. Un fuerte movimiento de solidaridad consiguió que a dos le conmutaran la pena de muerte por la de cadena perpetua.
En 1893, un tribunal de Illinois sentenció que los ahorcados no habían cometido ningún crimen.
¿Porque Estados Unidos, excluido de la celebración del Primero de Mayo
Cada año el Primero de Mayo conmemora el asesinato de cinco sindicalistas estadounidenses en 1886 en una de las mayores movilizaciones obreras celebradas en el norteño país en reclamación de la jornada laboral de ocho horas.
En julio de 1889 el I Congreso de la II Internacional acordó celebrar el Primero de Mayo como jornada de lucha del proletariado de todo el mundo y adoptó la siguiente resolución histórica: En París Francia.
“Debe organizarse una gran manifestación internacional en una misma fecha de tal manera que los trabajadores de cada uno de los países y de cada una de las ciudades exijan simultáneamente de las autoridades públicas limitar la jornada laboral a ocho horas y cumplir las demás resoluciones de este Congreso Internacional de París”.
Pero llama la atención que en Estados Unidos el Primero de Mayo no constituye un día de conmemoración; en su lugar se celebra el Día del Trabajo, el primer lunes de septiembre, convocado por primera vez en 1882 por la Noble Orden de los Caballeros del Trabajo.
Ello resulta paradójico, pues la ciudad de Chicago constituyó el origen de la celebración de la cual toman parte los trabajadores de casi todo el mundo.
El destacado politólogo estadounidense Noam Chomsky escribió que “la gente parece saber lo del Primero de Mayo en todas partes menos donde se originó,
en Estados Unidos.
Eso es porque los que tienen el poder han hecho todo lo posible por borrar su significado real, del primero de mayo y Satanizado la fecha con la proclamación del comunismo, pero aún más se destina n millones de dólares en campaña de desinformación y alieneamiento contra el arma única de defensa del proletariado, guiandolo hacia una conciencia individualista acompañado de religiosidad y manipulación de medios.
Hay que reconocer que esa estrategia ha logrado el resultado, en Estados Unidos los sindicatos dejaron atrás las luchas sociales y se dedicaron a la negociación extrajudicial convirtieron el sindicalismo en un nuevo modelo de empresas detrás de la clases políticas dominantes y podemos observar a los dirigentes sindicales, viajar por el mundo con privilegios y seguró, y muy alejados del papel histórico que debió desempeñar.
Más que defender al trabajador son meros negociadores con los empresarios, cada años los miles de trabajadores llegan a ser explotados y con la creciente xenofobia contra el inmigrante desatada en la región, la clase proletaria son utilizadas como bases para. Para maltratar y subexplotar a millones de migrantes trabajadores del mundo, dando alimento a los políticos más xenófobos y ultraderechistas en todo el mundo.
En un primero de mayo, Día Universal del trabajador en medio de la pandemia saludamos a los trabajadores que salieron a salvar vidas, Y con ellos diremos y proclamamos: Trabajadores de todo el mundo Unios, que obrero no tiene patria.
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