¿CAMBIO DE QUÉ?

Todo el mundo habla de cambio, porque el cambio tiene la mágica propiedad de generar lo nuevo, lo desconocido. Sin embargo, el cambio produce consecuencias positivas para unos y negativas para otros, Es decir, los cambios producen ganadores y perdedores. 

Al parecer el pueblo se quedo sin voceros, por lo menos legítimos que reclamen y puedan defender sus derechos; hombres y mujeres dispuestos a darlo todo, incluso sus vidas si fuera posible por la defensa de los más sanos intereses del país, un pueblo con carencias sufriendo los sinsabores de los desgobiernos, un pueblo con el pescuezo largo moribundo y muriendo, un pueblo infortunado y desdichado.

La política de exterminio iniciada después de sofocado el intento revolucionario de Abril del 1965 con la intervención yanqui, ha dado sus frutos. Terminado el conflicto bélico, se instauró en el 1966 el gobierno asesino, dictatorial, represivo, antidemocrático, despótico y brutal de Joaquín Balaguer que persiguió, encarceló, asesino y envió a decenas de jóvenes y combatientes que luchaban por la constitucionalidad del país al exilio y asesinó a periodistas y militares de izquierda, durante 12 años nuestro país fue víctima de la más fatal represión que país alguno haya vivido; se mantuvo la tortura contra los dirigentes estudiantiles y trabajadores, lo que era el otrora movimiento estudiantil fue desguañangado.

En la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) los grupos estudiantiles perdieron su esencia hace muchos años, las centrales obreras, entonces temibles, hoy parecen muñequitos de papel, muchos de los dirigentes sindicales se autorepresentan a sí mismos. Se han convertido en aprovechadores negociantes del sudor ajeno. Los que ayer eran sindicalistas ahora son “empresarios del transporte” usando al chofer como simple peón en su sucio y mezquino juego del ajedrez político empresarial.

Por otro lado, en el país está la llamada izquierda o los sectores progresistas, como así se hacen llamar, donde cuenta con dirigentes atomizados e inorgánicos y sin condiciones de líder que la unan y la puedan convertir en una opción de poder. La izquierda no aparece en las encuestas, ni forman parte de los debates que históricamente se celebran en el país. Su influencia, si es que la tienen, no se siente, esa izquierda no ha logrado ser autocrítica con su accionar, más bien, muestran una ceguera colectiva que como un lastre arrastran históricamente hasta el día de hoy, muchos se cuadran a la izquierda pero batean a la derecha y el PRM que son los mismos del PRD no tienen forma de diferenciarse porque forman parte de la partidocracia corrompida.

El gran capital nacional y extranjero se ha unido para explotar los recursos naturales renovables y no renovables sin que nadie lo rechace con voluntad, han depredado gran parte del país ante la mirada indiferente de cientos de dominicanos y del gobierno, se han llevado nuestro oro, la bauxita, el ferroníquel, estos verdugos se lo han llevado todo y solo nos están dejando un cascararon de país con pobreza y mucha miseria. Es penoso que los gobiernos se comporten como lacayos de esos capitales a cambio de algunas prebendas para sí mismos y al pueblo que se joda, que sufran los desarrapados. Quieren explotar Loma Miranda apoyado por este desgobierno, quieren destruir el pulmón de la cordillera central que es Loma Miranda.

La funesta corrupción es el pan nuestro de cada día, gente que va al gobierno a enriquecerse mientras el pueblo lleno de hambre sigue empobreciéndose más y más. Los poderes del Estado parecen poderes particulares, no tenemos justicia, la misma está secuestrada; no tenemos congreso, la separación de poderes es simbólica, el poder ejecutivo controla los demás poderes hasta la prensa para manipular y engañar al pueblo dominicano.

Durante este gobierno que tienes tres años, hemos visto como ha aumentado la corrupción, el crimen, el narcotráfico, la delincuencia local, la nacional y la transnacional; la inseguridad ciudadana sin que nadie la enfrente, ese cáncer que corroe la paz del pueblo dominicano como ese gusano que carcome la hoja de un árbol así la delincuencia está matando a este pueblo. Muchos somos cómplices por omisión, otros legitiman el robo el abuso de poder cuando reciben las funditas de arroz sustentado en este sistema podrido clientelar.

De igual manera, durante los gobiernos del PRD y PLD, ha aumentado la deuda externa en millones de dólares, en el gobierno que encabezó el expresidente Leonel Fernández, el déficit fiscal y de otras índoles aumentaron, en pocas palabras, “el país esta jodido”. Los pobres son más pobres, la clase media continúa empobreciéndose. Para este sector, se ha venido aplicando la política del exterminio total. Los combustibles, las tarifas eléctricas y del transporte aumentan salvajemente todos los días y  la única fuerza social que puede parar estos abusos es que se una el pueblo y diga: basta ya! del abuso del gobierno.

No hay escuelas suficientes, ni hospitales, ni trabajo para el hombre y la mujer dominicana, no hay dinero en la calle, no hay de nada, esto se jodio. Lo que si hay es mucha corrupción, mucho narcotráfico, crímenes, robos, atracos, que nos mantienen presos en nuestra propia libertad, sumidos en el miedo.

Me pregunto: ¿qué le espera al país? ¿Qué puede hacer la gente para salir de la desesperanza al ver que sus problemas de salud, empleo, educación, vivienda, alimentación y seguridad empeoran?

Pienso que si en este país no se ha producido una poblada es porque aún sigue petrificada, manipulada y esclava de la mente, de esa mente conformista, no así realista.