LA CARRERA POR EL PODER EN 2024

Por Henry Polanco

Independientemente de lo que dicen nuestra leyes electorales y las regulación del proceso electoral en la República Dominicana, a partir de hoy, se iniciará una carrera por el poder en el país, con mira al 2024.

Las carteleras de candidaturas para la presidencia, Senadurias, las diputaciones y alcaldías con sus regidores honorables ciudadanos, en el proceso electoral desarrollado en República Dominicana, es una muestra fehaciente de la falta de participación de la ciudadanía en la depuración de sus instituciones, como lo demostró el pasado proceso electoral, aunque todo se les atribuyó a la jodida Pandemia, incluyendo entre ellas a una de las más importantes a la hora de elegir representantes, de las principales fuerzas políticas, desde hoy aquellos que aún no han amarrado la cabra, tendrán que buscar al padrino político qué los empuje, así tratarán de convencer a más de 7 millones de posibles votantes a que elijan por sus buenos deseos los intereses de los partidos políticos que competirán, como siempre.

Creados y organizados en su mayoría a imagen y semejanza del Dios, del sistema, por personajes poderosos pero de dudosas ética en sus intenciones, los partidos siguen poseyendo el monopolio del poder político, pese al impulso por parte de la USAID, de los camajanes de la sociedad civil, o participación ciudadana, mediante la cual se obstaculiza la participación de líderes populares independientes y se imponen listados elaborados a conveniencia de sus dirigentes, o el mercado persa que siempre nos acompaña.

El ambiente electoral, sin embargo, comienza a calentarse por la inédita efervescencia alrededor de candidatos, o candidatas, quienes, se preparan para presentarse en las denominadas primarias o asambleas de partidos u organizaciones, con procesos maquillado de Democracia para competir en el mercado electoral.

Es lógico suponer el temor que despierta en cierto sector de la sociedad la perspectiva de un cambio tan rotundo en el escenario político, algo que es efímera y sin esperanza.

La historia del país ha estado jalonada de abusos y regida bajo un sistema cuyos resultados están a la vista, saqueo de fondos públicos; robo descabellado, Usos de los fondos públicos, influencia externa, padrinaje de familia influyente, en fin formato de exclusión de casi la mitad de la población; explotación laboral a niveles, legislación excluyente para la población, manipulación de Medios, propagación multimillonarias de propagandas vacías, y porque no unos qué otros lavado del narcotrafico, para rasganos la vestiduras luego.

Por ahora, la incógnita es cómo se van a desarrollar los pactos y acuerdos entre quienes representan la corrientes, anticorrupcion, y cuántos candidatos tendrán los arrestos de renunciar a sus pretensiones presidenciales para acuerpar a uno solo y dar el golpe de timón a la situación de extrema fragilidad, de la oposición, frente a un gobierno, que busca la reelección, no importa el método, ya sea eliminado al contrario vía judicial, o gastando miles de millones de pesos, en la propaganda y manipulación mediática, algo que se heredó del pasado reciente y que no ha cambiado, más que a favor del qué maneja el presupuesto nacional.

Por ahora solo resare algunos de los mandatos que hizo Judas iscarote en el calumniado, y que realizará el inmenso Eduardo Galeano, con miras a la buena nueva del capital.

Nubes de incienso y mirra perfuman el jolgorio de los fariseos que en el sanedrín celebran haberlo entregado todo al Imperio.

Ebrio con el vinagre de la esponja que humedeció los labios del Hijo del Hombre, por los vericuetos de la Vía Dolorosa regresa Judas dando tumbos y vociferando el Nuevo Evangelio:

Se os ha dicho: dad de comer al hambriento. Mas yo os digo: quitad el pan de la boca del pobre para darlo al mercader extranjero.

-Se os ha dicho: antes pasará un camello por el ojo de una aguja que un rico por las puertas del cielo. Mas yo os digo: ser rico es el cielo.

-Se os ha dicho: El Templo es casa de oración, pero lo habéis vuelto feria de mercaderes. Mas yo os digo: el Mercado es el único Templo, y en él se subasta al género humano.

-Se os ha dicho: Dad al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios. Mas yo os digo: dad al Imperio lo que es del Imperio y lo que no es del Imperio también.